Cuando desperté, usted
se había desvanecido,pero en el sueño
estaba dormido,
exhausto y dormido sobre mi
vientre.
Si soñé con usted así,
así virtuoso y ausente de deseo,
ausente y tan lejos de mí
como aquella niña, este río,
o sus manos,
es porque robarlo de ese modo
es mi forma de quererlo.
Quererlo es encontrarme una
mañana
devorando los restos de mis
sueños
hasta el siguiente encuentro.